Técnica de Aplicación Festoneada con Fieltro |
Y cuando hablo de "Hogar dulce Hogar" ... no aludo precisamente a un hogar siempre apacible, manso, ausente de aprietos ni obstáculos, no!... claro que no!!!. Han sido diez años colmados de fuertes resbalones que en más de una ocasión nos han dejado desparramados por el suelo y sin tiempo para ir recuperando el aire. Sin embargo, cuando todo parecía acabado... siempre un brote de vida volvía a levantarnos.
¿Cuántas cosas que pasamos juntos?, ¡qué diez años, ¿verdad?!, ¿a que sí, mi cielito?.
Un matrimonio que nace por aquellos años en un país revuelto, repleto de vientos huracanados que nos lanzan un buen día FUERA!, fuera de todo lo querido, de todo lo amado, de todo lo NUESTRO.
Y después, después de que esta patria amada nos declarara el desalojo sin remordimiento alguno, arribamos a esta otra tierra, una tierra bendita pero desconocida, inexplorada, que nos recibe sin ovaciones, con reparos más bien, los reparos normales de cuando uno intenta unirse a un país en el que no posee historia alguna y en el que la valía, si se posee, se demuestra muy poquito a poco.
Y así, con esta desazón, desprovistos de todo, huérfanos de patria y de afectos comenzamos a caminar juntos, siempre juntos, cuidándonos mutuamente y esmerándonos para no desbarrancarnos.
Técnica de Aplicación Festoneada con Fieltro |
Sí, ya sé que hubieron momentos en que nos íbamos desintegrando, nos íbamos desangrando en las adversidades y en el descrédito de muchos pero... aún así, cuando pensábamos que éramos tristes despojos, el MILAGRO obraba, un hilo de aliento, de ánimo y valor volvía a resurgir de entre nuestras entrañas y... otra vez de pié y... otra vez juntos, siempre juntos, uno a la vera del otro, dándonos la mano y elevando nuestra unión hacia lo más alto, celebrando una de las mayores bendiciones que Dios nos podía conceder: la de tenernos, la de amarnos y la de permanecer unidos, procurando que lo artificial no nos distrajera de lo esencial.
Técnica de Aplicación Festoneada con Fieltro |
Pues bien, este año hemos cumplido nada más ni nada menos que diez años de matrimonio y no quería que este año finalizara sin exhibir esta labor que nos hemos obsequiado con inmensa ilusión hace ya algún tiempo y que nos recuerda, cada vez que nos cruzamos con ella, que no importan las dificultades, no importa cuan cojos quedemos luego de tantas desventuras y tampoco importa el sinnúmero de lugares por los que debamos de transitar, porque siempre que estemos juntos, siempre seremos capaces de construir y sostener nuestro "Hogar dulce Hogar".
¡¡¡¡FELIZ AÑO PARA TODOS!!!!